Ciudad de México — A los 20 años, Mía Rubín da un giro audaz en su carrera artística: ahora, bajo el nombre de MIA, estrena su primer sencillo oficial como solista titulado “Chill”, una canción que marca el inicio de una nueva etapa llena de intenciones, sombras y esperanza.
Desde hace semanas, la joven ha ido encendiendo la expectación entre sus seguidores. A través de sus redes sociales compartió adelantos del tema, pequeños fragmentos sonoros, retos para que sus fans participen y, lo más conmovedor, reflexiones íntimas sobre sus inseguridades. En uno de sus mensajes reveló que la presión de ser hija de figuras públicas le generó miedo, y que esta canción representa esa versión de sí misma más confiada, capaz de “hacer todo lo que sueña”.
Mía Rubín se reinventa y abre su corazón en este lanzamiento
“He sentido que miles de ojos están pendientes de cada paso que doy… y a veces me paraliza. Pero con ‘Chill’ quiero soltar eso y canalizarme hacia quien verdaderamente soy”, compartió Mía en una de sus publicaciones.
Detrás de este lanzamiento hay más que una canción: es un proceso de autodescubrimiento. Mía ha expresado que este sencillo representa dejar atrás inseguridades y abrirse al reto de mostrarse vulnerable. En entrevistas recientes, confesó que las críticas llegaron a provocarle crisis emocionales, pero que siempre encontró refugio en su familia —con su madre Andrea Legarreta y su padre Erik Rubín como pilares— para recomponerse y seguir adelante.
Aunque hasta ahora su propuesta musical se había acercado al bolero trap y fusiones íntimas con su EP “Nunca Más”, con “Chill” se adentra en sonidos más contemporáneos, relajados y personales.
Fans y medios ya observan con atención: ¿será este el despegue definitivo de MIA como artista independiente? Con este sencillo, no solo presenta música nueva: revela una Mía Rubín más transparente, segura y lista para que el mundo la conozca por quien es.