En un emotivo tributo a la memoria de Lorena Rojas, una de las figuras más queridas de la televisión mexicana, su hermana, Mayra Rojas, comparte un conmovedor vistazo a la vida que continúa tras una década de su partida. A medida que se acerca el aniversario de la trágica muerte de Lorena en 2015, Mayra Rojas emerge como una figura central en la crianza de la hija adoptiva de Lorena, Luciana.

Mayra Rojas: Una madre ejemplar
Lorena Rojas, recordada por sus roles estelares en telenovelas como “El cuerpo del deseo” y “Pecados ajenos”, dejó un legado imborrable en la industria del entretenimiento. Sin embargo, su verdadero tesoro fue su hija Luciana, a quien adoptó antes de su prematura partida. A través de una tierna imagen compartida en su perfil de Instagram, Mayra Rojas revela la belleza de la nueva familia que ha formado, donde el amor persiste como un faro de esperanza.
Desde que Mayra asumió la custodia de Luciana después del fallecimiento de Lorena, ha dedicado su vida a proporcionar amor y estabilidad a su sobrina. A pesar de la tragedia que marcó sus vidas, Mayra ha sido una madre ejemplar para Luciana, acompañándola en cada paso de su camino hacia la adolescencia.
En palabras de Mayra Rojas, Luciana crece rodeada de amor y cuidado, junto a sus hermanos, Fabián e Ivana, quienes son tanto primos como hermanos para ella. Esta unidad familiar es un testimonio conmovedor del vínculo indestructible que comparten, un lazo que trasciende la sangre y se arraiga en el amor incondicional.
Aunque Lorena Rojas perdió su batalla contra el cáncer, su legado perdura en el amor y la devoción que Mayra brinda a Luciana. Esta historia de amor y resiliencia es un recordatorio conmovedor de la fuerza del espíritu humano para trascender la adversidad y encontrar la luz incluso en los momentos más oscuros.