A sus 71 años, Lyn May sigue siendo un icono de la belleza y el espectáculo en México. Con una figura envidiable, continúa brillando en el escenario con sus canciones, presentaciones y participaciones en televisión y cine. Sin embargo, su camino no ha sido fácil. A los 25 años, un terrible error con aceite inyectado en su rostro dejó cicatrices profundas, no solo en su piel, sino también en su alma.
Lyn May sigue cosechando éxitos y ahora busca mejorar su apariencia
Lyn May recuerda con dolor aquel episodio que marcó su vida: “Tuve la desgracia, no de hacerme cirugías, sino de inyectarme la cara. Llegaron unas tipas cuando yo tenía como 25 años y me dijeron: ‘Te vamos a poner un aceite, que es colágeno, en las mejillas para que se te hagan unos pómulos bonitos’. Y me inyectaron un aceite horrible”. Esta experiencia la sumió en una profunda depresión, llevándola a pensar en quitarse la vida. “Estaba muy joven. No necesitaba nada y tenía una cara preciosa. Estas mujeres llegaron para sacarme dinero. Quería mor… Tomar pastillas y envenen… No podía ni verme al espejo. Rompí todos los que había en casa”.
A pesar de las adversidades, Lyn May encontró en el baile y su trabajo una fuente de sanación. “Me ayudó mucho el baile. Mi trabajo. Tuve que ir con un psicólogo mucho tiempo. Me ayudó a aceptarme, quererme y sentirme bien. Me dijo que con el tiempo iba a salir eso e iba a quedar como antes”. Hoy, con la ayuda de un médico que ha estado removiendo las secuelas del aceite, se siente mucho mejor y aceptada por su público: “La gente me acepta como soy”.
Lyn May no solo ha superado los obstáculos físicos y emocionales, sino que ha mantenido una impresionante disciplina que la mantiene en forma. “Me veo bien y, cuando me maquillan, quedo muchísimo mejor. Me pongo a bailar y lo que veo en el espejo es cómo muevo las caderas y eso me hace sentir bien. Pienso en volver a ponerme busto. Me quité las prótesis porque se tienen que cambiar cada 10 años. Ahorita tengo mi busto, que es pequeño”.
La vedette atribuye su elasticidad y buena salud a años de ballet y una alimentación sencilla sin lácteos ni carne. “Soy muy elástica porque tengo muchos años haciendo ballet. Mi alimentación es sencilla, nada de lácteos ni carne. Así que, de salud, estoy perfecta”.
Lyn May sigue conectando con nuevas generaciones a través de su música. Canciones como ‘La loba’, ‘Claro que yes’, ‘Mambo Lupita’, y ‘Al corazón le vale’ son populares entre los jóvenes. Además, sueña con colaboraciones con artistas contemporáneos como Yailín ‘La más viral’ y Peso Pluma, aunque este último le parece “muy creído”.
Cuando se le preguntó si le gustaría participar en el programa “Siempre Reinas”, su respuesta fue contundente: “Como Siempre reinas, no. Pero como Siempre reina, sí. Para mí solamente. No necesito salir en un grupo porque yo solita puedo llenarlo todo”. Con esta actitud, Lyn May continúa demostrando que su espíritu indomable y su talento siguen siendo incomparables.
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