Jesús Malverde, conocido como el santo de los narcotraficantes se hizo famoso por la labor que realizó en donde robaba a los más ricos para repartirlo a los pobres, pues además la gente empezó a venerarlo a partir de los milagros que realizaba al salvar a capos de las drogas de ser atrapados por sus enemigos o por las autoridades.

Jesús Juárez Mazo, mejor conocido como Jesús Malverde nació el 24 de diciembre de 1870 en Juntas de Mocorito, Sinaloa. Su vida nunca fue fácil, de su familia recibía malos tratos y de la gente y hacendados con los que trabajó recibía a veces hasta golpes.

Cansado de la vida que llevaba decidió robar a las personas ricas que le habían hecho daño con el objetivo de repartirlo a los más pobres.

Un día, las autoridades hartas de recibir tantas denuncias al respecto decidieron poner precio a su cabeza, por lo que muchos de sus enemigos se dieron a la tarea de buscarlo.

La mala suerte para Malverde llegó cuando uno de sus cazadores lo hirió de bala en la pierna; en su afán por escapar se adentró a la selva en donde la herida se le infectó.

Sabiendo que iba a morir buscó a una persona de confianza para que lo entregara a las autoridades y que cobrara la recompensa, pues una vez más lo que el quería era ayudar a las personas.

Malverde murió ahorcado el 3 de mayo de 1909.

Para mucha gente Malverde ya era un héroe, por lo que no dudaron en empezar a pedir favores aún él estando muerto.

Lo curioso fue cuando las situaciones de las personas que pedían algo se empezaban a resolver, y es que aunque la iglesia católica no lo reconoce como un santo, en su ciudad natal si lo es.

Uno de los primeros milagros que realizó fue precisamente a un muchacho que vendía droga; este fue descubierto por su padre de los malos negocios que realizaba y lo mandó matar, sin embargo, estando agonizando le pidió ayuda a Malverde quien se dice lo salvó de morir.

Jesús Malverde cuenta con 3 capillas dedicadas a el, una en Culiacán, Sinaloa; otra en Cali, Colombia y la última en Los Ángeles, California (la ruta de la coca).

Diversos narcotraficantes famosos, políticos y figuras del medio han visitado los recintos, además es muy común ver cientos de veladoras prendidas en honor del santo, así como letreros pidiendo y agradeciendo los favores hechos.

El 3 de mayo de cada año, día oficial de Jesús Malverde, las capillas antes mencionadas se inundan de gente que acude a visitarlo para honrarlo.