En los últimos días el volcán Popocatépetl ha estado en tendencia debido al intenso registro de actividad que a tenido, y es que debido a las erupciones que ha presentado, se ha detectado caída de ceniza en lugares como Puebla, Estado de México y parte de la CDMX.

Debido a esta situación, diversas dependencias han emitido algunas recomendaciones, pues inhalarla podría traer problemas en nuestra salud por los componentes que contiene: restos del proceso de combustión, roca pulverizada, minerales y gases como el dióxido de azufre (SO2).
¡Protégete de la ceniza volcánica y evita padecer alguna de estas enfermedades!
Inhalar ceniza volcánica podría provocar enfermedades respiratorias como conjuntivitis, rinitis alérgica, sinusitis aguda, faringitis, amigdalitis, laringitis aguda, bronquitis, dermatitis, broncoespasmo por exacerbaciones de asma y EPOC.
El sistema digestivo también podría verse afectado en caso de consumir alimentos contaminados que hayan sido expuestos a la ceniza.
Algunos síntomas que se podrían presentar por estar en contacto con la ceniza volcánica son: irritación ocular, lagrimeo, sensación de un cuerpo extraño en el ojo, escurrimiento nasal, tos constante, picazón, hinchazón y enrojecimiento en los ojos.
Las medidas emitidas por el Gobierno de México para protegerte son:
- Evita hacer actividades al aire libre.
- Protege tus ojos, nariz y boca, si tienes la necesidad de salir a la intemperie.
- Cierra puertas y ventanas.
- Sella con trapos húmedos las rendijas y las ventilas, para limitar la entrada de ceniza a casas y edificios.
- Sacude la ceniza con plumeros para que no se rayen las superficies.
- Tapa tinacos y otros depósitos para que no se contaminen.
- Cubre aparatos, equipos y automóviles para que no se deterioren ni rayen.
- Evita conducir el automóvil, ya que la ceniza reduce la visibilidad y vuelve el pavimento resbaladizo.
- Recomienda a niñas, niños, así como a personas adultas mayores y con enfermedades respiratorias que eviten el contacto con la ceniza.
- Si tienes mascotas, vigila que el agua y los alimentos que consumen no se contaminen.